¡¡AFRICA!!
El coloso Africano no ha querido mostrarnos su rostro. Despues de casi mil kilometros buscando su preciosa cara, nos venimos con una gran decepción. Esto nos obligará a volver a Tanzania buscando de nuevo ver a su dios de las alturas.
Desde la capital, Dodoma, parte una pista en dirección norte , la A 104, de casi 300 kilometros de longitud, hasta la localidad de Arusha Centro de operaciones para las excursiones en esta nueva zona de Tanzania, plagada de turistas y tour operadores, que alejan un poco esa visión del África solitaria, bucólica, romántica que nos ha venido acostumbrando. La A 104 esta en penoso estado, eso estando seca, porque lloviendo se vuelve impracticable. Recorrer esa pista nos llevaría mas de dos días de traqueteo, alguna rotura y saturación física. Ya tuvimos suficiente en la jornada pasada con la pista que iba de Iringa a Dodoma.
Existe una alternativa, que esta casi terminada de asfaltar. La ruta es desde Dodoma, dirección Oeste `por asfalto hasta Manyoni, y de allí por asfalto también hasta Singida. El asafalto se termina como a 50 kilometros de la localidad de Babati., pero ahí siguen los chinos trabajando a marchas forzadas para terminarlo en un añito. Así que estara completamente asfaltada y aunque se dá un rodeo de casi 100 kilometros respecto a la A 104, de veras que merece la pena si queréis ganar tiempo y conservar mecanica. Lo único negativo, es que hemos omitido la gran estepa masai que recorre en su totalidad la A 104, pero como recompensa hemos pasado al lado del gran monte Hanang.
Como antesala del gran Kilimanjaro, primero divisas el monte Hanang de 3420 metros, justo antes de la población de Babati. Ya pasada esta población y el paisaje cambia drásticamente. De estar practicamente solos durante toda nuestra travesía africana, empezamos a ver centenares de tour-operadores llevando a miles de turistas. Nos estamos aproximando a tres de los destinos mas visitados de África. El gran Kilimanjaro, el cráter del Gorongoro y el PN del Serengueti. Comprendo que no todo el mundo quiera ni pueda , viajar a nuestra manera, pero este tipo de turismo quita todo el romanticismo a nuestra África. Es como una gran colmena, que a las primeras luces del alba salen los todo terrenos repletos de guiris en busca de esa foto tan ansiada, y al caer la tarde, todo el mundo de vuelta con su recompensa.
Despues del monte Hanang se divisa el impresionente monte Meru de 4556. Este lleva a confusión con el Kilimanjaro. El rey esta justo detras de él. Pasada la población de Arusha, como a 50 kilometros, ya se empieza a ver la cima de África.
Nosotros en ningún momento nos planteamos subirla, lo primero por condición física y lo segundo por tiempo. Lleva unos seis días la ascensión, aclimatación y descenso. Lo máximo que hicimos fue acercarnos a la plataforma donde alpinistas y porteadores se reunen para ultimar preparativos antes del ascenso.
Lo que hay que pagar por disfrutar de la ascensión al Kilimanjaro es simplemente escalofriamente. Unos 500US$. Esta claro que el turismo que viene aquí es muy especial, y como bien cuenta la guía Lonley planet, es imposible visitar Tanzania gastandose poco dinero..
Nosotros aunque partimos pronto de la población de Arusha camino del PN del Kilimanjaro, apenas pudimos ver desde lo lejos su cima. Enseguida se empezó a cubrir y al llegar a la plataforma de ascenso, estaba ya completamente nublado de tormentas. Por eso dije al principio de este capitulo, que nos había dejado con la miel en los labios. Lo vimos de lejos, pero nada más.
La población de Arusha se usa como centro de operaciones para visitar todo esto. Es una ciudad bulliciosa con toda clase de servicios y con infinidad de hoteles y lodge para dar cabida a tanto turista.El acceso a la ciudad desde Babati transcurre por una carretera bien asfaltada, y sin mayor dificultad. Es imposible tener tanta industria turística sin buenos accesos. Pero claro, estan los descerebrados de los conductores de autobuses que siguen haciendo de las suyas. Nos han vuelto a romper la luna del Unimog con una piedra. La pusimos hace bien poquito, en Johannesburgo. Cosas que pasan, contra esto no se puede luchar. Resignación!!